Lincencia Creative Commons


Mapa del Municipio Santos Michelena

viernes, 1 de abril de 2022

LAS COCUIZAS

DOCUMENTO 2765 BANDO DE BOLÍVAR A LOS HABITANTES DE LOS VALLES DEL TUY FECHADO EN EL CONSEJO EL 14 DE MARZO DE 1818, MEDIANTE EL CUAL HACE UN LLAMADO A TODOS LOS HOMBRES PARA QUE TOMEN LAS ARMAS EN FAVOR DE LA REPÚBLICA, EL LLAMADO ES EXTENSIVO A LOS ANTIGUOS ESCLAVOS.* SIMÓN BOLÍVAR, Jefe Supremo de la República, Capitán General de los Ejércitos de Venezuela y de la Nueva Granada, &., &. A los habitantes de los valles del Tuy. Libre vuestro territorio de enemigos es vuestro primer deber reuniros al Gobierno de la República que como siempre os tratará como sus hijos predilectos. Vuestra libertad, vuestras vidas, y vuestros bienes están en perfecta seguridad. Artículo Iº Todos los habitantes hábiles para tomar las armas se reunirán en los pueblos de su jurisdicción trayendo consigo sus armas y sus bestias, o presentando las que tengan para el servicio de la República. Artículo 2ºAbolida la esclavitud en Venezuela, todos los hombres que antes eran esclavos se presentarán al servicio para defender su libertad. Artículo 3º Los que sepan dónde existan bienes del enemigo los denunciarán para su captura. Artículo 4º Los Comandantes y Justicias de los pueblos y villas reunirán todos los vecinos y formarán de ellos cuerpos cívicos de infantería y de caballería para la defensa de sus propios hogares. Artículo 5º Todas las fraguas serán empleadas en construir lanzas y los armeros en componer las armas para el servicio de los mismos cuerpos cívicos. Artículo 6º Los Comandantes de los pueblos pondrán la mayor vigilancia en conservar el orden en ellos y hacer cumplir exactamente todos los artículos de este bando. Publíquese, y fíjese para que llegue a noticia de todos.

Cuartel general del Consejo a 14 de marzo de 1818.—8º

BOLÍVAR

ARCHIVO DE BOLÍVAR, LAS COCUIZAS


Archivo de Bolívar



 

VALLE DE TIARA

Autor: Ana María Rodrigues, País: Venezuela

 

Con un hermoso valle, desde lo alto enamoras, en tus caminos serpenteantes hospedas añorados recuerdos.

En la cúspide tú diadema, denominada “Lomas de Níquel, extraen las riquezas olvidado tu historia.

Fuiste en tu tiempo, pueblo de guerreros, hija de Tiaroa, trabajador y cafetalero.

En tus cristalinas aguas del “Castaño”, con tu belleza impactaste al viajero, que llega a tu pueblo para hospedarse.

“Tiara” enigmática, que en tus tierras conservas el frescor de la historia, desde “Las Dolores de Aragua a Agua Fría de Caramacate”.

INFIERNO QUE TRAEN PERROS Y FUEGO

MUERTE DE GUAICAIPURO

Autor: Ana María Rodrigues, País: Venezuela

 

Entre las frías montañas de la cúspide de los cielos, existió un indo de acero.

Lucho sin descanso, con lanzas y flechas; su tierra quiso libre.

Corre, corre sin descanso, con el infierno a su espalda, le sigue los perros para borrar sus pasos.

La hazaña el héroe dejo, “Guaicaipuro” no murió, su pueblo libero.

 

SINTESIS CURRICULAR

 

Ana Maria Rodrigues Macedo

Seudónimo: Ana Macedo.

(Caracas, 1967)

 

Abogado (UBV, 2015), Diplomada como Cronista comunal (RNH, 2017), Profesora universitaria (2016-2018), Profesora de Lengua y Comunicación (2018-2020), Paleógrafa (2019), Reportera gráfica 2.0 (2018), Productora radial y audiovisual (2020), miembro fundador de la Fundación Cinematográfica Cinema Sur (2017).  Escritora por vocación en los géneros poesía, crónicas y artículos y apasionada en todo lo que tenga que ver con Comunicación Social (Períodismo) e informática. Por lo general, me encanta leer y escribir y leo todo los contenidos y libros que me llagan a mis manos.

Nací el día 7 de junio del año 1967, en la Maternidad Concepción Palacios, en la parroquia San Juan; Caracas. Son mis padres de origen europeos (Ilha da Madeira, Portugal), siendo de cinco (5) hermanos, la mayor.

Ha publicado Crónicas locales, "Reseña del Caserío Guayita" en el cuaderno social N° 2 de la Revista Cultural Morocopo. Las Tejerías, (pág. 16, 2009). Crónicas locales en el Blog digital "Bitácora de Las Tejerías" (https://lastejerias.blogspot.com.

Miembro activo de la Red de Historia, Memoria y Patrimonio de Aragua, capitulo Santos Michelena (2017), Ponente en V Encuentro de Historiadores, Investigadores, Cronistas de Maracay (2019), Ponente en el 15to. Congreso de Historia Regional y Local y 2do. de Congreso Internacional de Historia (2019). Ponente con la investigación "Memorias de Vicenta Blanco" por el Centro Nacional de Estudios Históricos (2017).

Participó en el Encuentro Latinoamericano de poeta La Victoria, 2015. En el cierre poético VI Encuentro Latinoamericano de poetas La Victoria con el poema "¡Ay, poeta! (La Victoria, 2019). En el V Encuentro Latinoamericano de poetas La Victoria con el poema " Psicología de un poeta" (La Vitoria, 2018). En la Ruta de la poesía con el Micro-relato poético "La luna y el Sol”, en homenaje a "Maruja Flores" (Maracay, 2018).

Colaboradora en la Revista Digital Poética Azahar (2019- Actualidad). Publicó en la Revista Poética Azahar, N° 104, pág. 99, con el Micro-relato poético "La Luna y el sol", España, 2020), N° 105, pág. 98, con el poema "Creación" (España, 2020), el poema "Amigo" (2021), el poema "Psicología de un poeta" (2021).

Participó en la dinámica cultural Día Internacional de Nelson Mandela con el Aforismo a Nelson Mandela, "Prefiero el ruido de la paz, al silencio de una guerra", para el Diario Digital Escribas, Artes, Letras y Humanidades (Chile, 2020). Participó en la dinámica Naturaleza- Estaciones "Haikü" con el poema "Nido de Flores” para el Diario Digital Escribas, Artes, letras y humanidades, (Chile, 2020), Participó en la dinámica cultural Micro-relato con el poema " ", para el Diario Digital Escribas, Artes, letras y humanidades, (Chile, 2020). Participó en la dinámica del Audiovisual de Haikü Argentina, con el Haikü  de Otoño "Migajas de pan", Argentina (Argentina, 2020).

Participó en el evento de Escribas, arte, letras y humanidades, Diario Digital con la dinámica realiza una postal y dedicarle al día Mundial de la poesía con el poema "Querida poesía" (Chile, 2021), participó con el poema "Eres poesía" para la Radio Satélite y Americavisión (Chile, 2021), Participó en Sonhos y poesías para el evento Louvor, ....(Brasil, 2021).

 

 

 

TOPÓNIMO DE MOCUNDO

Por: Ana Macedo

Actualmente pertenece a la parroquia Las Tejerías, Municipio Santos Michelena, Estado Aragua. Sus orígenes se remota a la hacienda Mocundo: Santa María de Mocundo, Araiza de Mocundo, llegando sus linderos a la Quebrada de Guayabita (Guayitas).

Mocundo es voz de origen Meregoto, que significa “lo que está escondido” según (Omar Ider, 1998), deviene de “Muku”, lo cual significa “Lugar o sitio” y se convierte en morfema “Kundok”, que equivaldría a “Lugar viejo o antiguo lugar”. Este sector se ubica en el bajo Tuy (llamado también, por los indios Quiri-Quires “Tucuy” que en voz cumanagoto significa “Agua de Yuca” por el color de sus aguas.

Mocundo también puede ser una voz de origen africano o una variación de la palabra “Macondo”, que es fitotopónimo colombiano perteneciente a la bombacáceas (cavanillesis plantanifolia), lo cual las semillas de esta planta se obtiene un aceite combustible empleado en medicina. Según Botello dice que es un vocablo desconocido.

Según (Álvarez D´Armas, 2006), señala que todas las investigaciones llevan a que la palabra “Mocundo” es africanismo (10) y posiblemente es una palabra compuesta que proviene del KIKONGO: MU (prefijo)+ KUNDU (con acento grave sobre la primera U), el cual significa “Residencia, domicilio”.

Las comunidades indígenas labraban en sus orillas cultivando Yuca para la elaboración del Casabe (Naiboa), lo cual eran cubiertas por miel de abejas producida en los arboles de la localidad y también, cultivaban el ocumo, además de maíz, verduras entre otros rubros aprovechando las aguas en acequias de tierra provenientes del río Tuy.

Luego con la llegada de los conquistadores y fundadores españoles se aparecieron las primeras haciendas cafetaleras y de caña de azúcar y en sus cercanías o riberas construían alambiques donde sus norias eran movidas por la fuerza hidráulica del río Tuy.

Otros sitios denominados MOCUNDO se encuentran en el estado Carabobo, Lara y Aragua. En Carabobo en la localidad de Guácara, donde existió una hacienda llamada Mocundo con esclavos africanos, pertenecientes al Marqués del Toro, Francisco Rodríguez, quien era un opulento terrateniente de la región.

El topónimo se encuentra en el Camerún, África, como orónimo de volcán o cono volcánico llamado MOKUNDO y en el siglo XIX era el nombre de un comerciante de la ciudad de Dikolo.

MEMORIAS DE VICENTA BLANCO


 

VICENTA BLANCO

Nació en la histórica ciudad de La Victoria el 8 de agosto de 1954 en el hospital Concepción Palacios de La Victoria. Sus padres Eusebia Blanco, quien aún vive y Martín Colmenares Revete (+).  Desde que nació fue a vivir en Araiza y pasó toda su niñez junto a sus padres en la finca "Mocundo" en Araiza, viviendo en carpas. Cuenta Vicenta que cada vez que su papá se mudaba recogían la ropa en sacos, los montaban en las mulas y buscaban un lugar nuevo donde hubiera agua para cultivar el conuco y así sostenerse. En una de sus memorias recuerda que su papá se mudó para "San tuque" y ahí no prosperaron con la agricultura, por la poca agua. Vivió en Araiza su niñez y juventud y en la finca "Vizcaya" vivió 5 a 6 años.

Desde niña trabajo con su familia como peones en la finca "Mocundo" propiedad de Hortensia De Mejías mientras su mamá ayudaba a preparar la comida y ella una niña de 8 años ayudaba en las labores y cultivar la tierra. Vicenta nunca aprendió a leer y escribir, más si a narrar sus experiencias de vida a sus hijos y vecinos. De su primer concubinato tuvo tres (3) hijos: Doris, Williams y Ana y del último concubinato tuvo una (1) hija.

En uno de sus relatos cuenta que en Araiza cultivaban verduras y café en las faldas del cerro y en las Vegas del Río Tuy y la Quebrada de Araiza, en la montaña criaban el ganado. En la casa grande que quedaba por los lados de "Las Patillas", funcionaba una oficina donde llegaba los arrieros a descargar la mercancía y pasarla a otros burro, ahí comían y descansaban y después seguían en su viaje por el camino real hacia otras estaciones (Guayas o Guayita). En la casona preparaban la comida para los peones y para los arrieros, además de traer la leche para preparar el queso llanero, el cual,  lo untaban con bosta de vaca para que no le callera los gusanos y después de curado lo raspaban quedando el puro queso llanero; lo que hoy en día lo conocemos como queso artesanal. Vicenta, se iba con la Sra. Hortensia a revisar los linderos de la finca "Mocundo", montadas en una mula cerro arriba, y en algunos puntos del lindero procedían con una chícora romper la roca viva para colocar la cerca de púas. Comenta que era como Candela cuando le daban a la roca para romperla.

Vicenta se vino a vivir a Guayita a los 36 años cerca de sus hermanas y desde entonces se quedó aportando conocimientos y narrando historias a sus nietos, bisnietos y vecinos.

Queda mucho que contar sobre la biografía de Vicenta Blanco.

 Fuentes: Vicenta Blanco


MEMORIAS DE VICENTA BLANCO

Por: Abg. Ana María Rodrigues Macedo

Crònista Comunal

CRONICAS “MEMORIAS DE VICENTA BLANCO

El día 27 de julio del año 2017, me dirigí a la casa del Sr. Gregorio Alis Rodríguez Armas, para conocer un poco más de la historia de las parteras de Guayita. El Sr. Gregorio no se encontraba, sin embargo, me atendió su hija Doris Graterol Rodríguez y su tío Francisco Rodríguez Armas.

El Sr. Francisco narra con detalles quienes fueron las parteras en Guayita, (Adela Vásquez, que vivía en El Turpial, Paula Díaz, vivía en Guayita, Victoria Gil en la Variante y una llamada Vicenta que vivía por sector el Sapo; esta última era partera titulada, y Adela Perales que vivía en el Alambique). Cada una de ellas acudió a los partos en Guayita en las distintas épocas y los partos más difíciles los sacaba en parihuelas o ambulancias de mulas o caballos hasta el ambulatorio más cercano. Me sorprendió, que Francisco Rodríguez conociera tanta información sobre las parteras siendo un hombre. Francisco me recomendó que hablara con Emeregildo Blanco el tío de Vicenta Blanco para conocer más detalles de las parteras y ampliar la crónica de las parteras de Guayita.

Caminé por un camino de tierra hacia la casa de Emeregildo Blanco y al llegar a su casa (un rancho de tablas y zinc de color azul y piso de cemento), me encontré con su nieto Aníbal Bernal que me informo que se su abuelo se encontraba en el conuco sembrando. Debido a que iba a tardar en llegar procedí regresarme por el mismo camino.

En el camino pensaba, con quien me entrevistaría y fue cuando me acordé de Vicenta Blanco que también conoce de historia local debido a su edad. Pasé por camino que va hacia la casa de Francisco Javier Oropeza Lugo; luego me dirigí por una vereda de tierra hasta la casa de Vicenta (un rancho de latón y zinc, pintada de color azul verdoso, con piso de cemento), que se encuentra al cerca de la escuelita, eso sí, toda su parcela limpia de maleza y con algunos cultivos de yuca, quinchoncho, caraotas negras, maíz entre otros rubros típicos de la zona.

Vicenta se encontraba sentada en una vieja silla de mimbre (azul y blanco) ya desarmándose por el tiempo y el uso; limpiaba caraotas negras la cual recoleto de su conuco y las colocaba a secar sobre una bolsa plástica. Al verme llegar me invito a sentarme y conversar mientras limpiaba la caraota. Al rato de la conversación le comente que estaba realizando una investigación sobre las parteras de Guayita y fue cuando comenzó a narrar  parte de la historia de la comunidad.

Hubo un momento que le pregunté sobre si el abuelo Francisco era como el aguacil o Jefe Civil de Guayita, que según la Constitución del Estado Aragua para 1904, establecía en la sección V, Del régimen político de los Distritos en su artículo 65, que cada distrito habría un Jefe Civil y en cada uno de los municipios habría un Jefe Civil que haría cumplir los Decretos, Ordenanzas y Resoluciones, eso quería decir que el jefe civil tendría que ser del pueblo de Las Tejerías y Francisco (El Aguacil), sería nombrado por el jefe civil o algún funcionario del campamento para regular el paso de los arrieros, debido a la contaminación brotada de la peste bubónica. En dicho campamentos (2), funcionaban como centro de investigación y control de la peste bubónica, bajo la administración del Campamento Rangel en la parroquia Tiara, ya que para la época paso obligatorio para los Valles del Tuy y El Llano (Valladolid, San Sebastián de los Reyes, Paò de Zarate). Era por estos caminos (Los Colorados, Guayita, Boca de Cagua, Las Casitas, Cascaronal, Cagua Las Mercedes, Agua Amarillas o Las Palomas, una de las rutas para llegar a su destino comercial. De Guayita existía un camino real hacia Guayas y Las Tejerías, el cual, según la crónica de Vicenta Blanco, el camino real fue tapiado en la construcción de la Autopista Regional del Centro. Sin embargo, este sería otra crónica para establecer las rutas comerciales de los caminos de recuas.

Vicenta procedió a narrar algunas historias que le conto su madre Eusebia Blanco. Parte de esas historias fueron transcritas y otras están aún en archivo de palabra esperando ser escritas. Vicenta Blanco por ser una persona analfabeta, pero servicial me pidió que escribiera parte de esas historias para dejar algo a su comunidad y también para ayudarme con mi diplomado de Cronista Comunal.

Al principio de la conversación escribía las notas, pero al darme cuenta de toda la información importante sobre la finca "Mocundo" y las rutas comerciales y los caminos reales procedí grabarla con el móvil. Vicenta narra los linderos de la hacienda "Mocundo" en Araiza y Guayita y menciona que Guayita quebrada arriba, subiendo por la vuelta de Paula hasta el topo, bajando por El Jabillal, quebrada abajo hacia el puente que une Santa María y El Jabillal, Rio Tuy abajo, subiendo por el topo, lindando con la finca de los Hernández, bajando por la finca La Coromoto, rio Tuy abajo hasta hacer lindero con Quebrada Guayita nuevamente. Claro, habría que realizar el mapa para poder situarnos en el tiempo y espacio.

También, hablo sobre los cultivos, ganado, las vivencias de cuando niña en la cacería de ratas y la peste bubónica, cuando la abuela Paula Díaz la bañaba con DDT, los arrieros y burro campanero, las perdices, los campamentos de control de la peste, las rutas comerciales entre los colorados y los valles de Tuy, además de Capachal (La Esperanza), las costumbres de un pueblo indio campesino, los conucos, en fin, con emoción y sentimientos narra hechos contados por sus abuelos y padres a través del relato oral.

Al recordar sus memorias narra hechos importantes ocurridos, hace 74 años (1943 -1954), hechos coyunturales que marcaron la historia de un pueblo que se ha negado perder su voz, un pueblo que busca dar a conocer sus memorias quedando más historias por escribir y transcribir de cada persona que según su contexto y visión narra sus vivencias y relatos ya que cada persona es Crònista de su propia realidad y de las coyunturas de su época.

Través de esta experiencia y al estilo periodístico transcribo estas crónicas de un pueblo indios - campesinos que apenas conocen las letras, sin embargo dentro de sus recuerdos fluyen las palabras que trasmiten de generación tras generación, negándose a desaparecer y hacer escuchar su voz. Así como dijo una vez su hijo "Williams" conocido por todos como el “Mocho Williams” ..."Nadie conoce a Guayita, tanto así que ni en los mapas aparecen".

Hoy en día, Guayita lucha por ser reconocida y encontrar un lugar en las crónicas, lo poco que he escrito y dado a conocer en mi blog BITACORA DE LAS TEJERIAS (lastejerias.blogspot.com), en la Revista Cultural Nª 2 Morocopo, año 2010, pág. 16, RESEÑA DE GUAYITA y ahora con la crónica para certificarme en el Diplomado de Cronista Comunal, Guayita busca ser escuchada y ser reconocida como “CAMINO DE TROPAS Y ARRIEROS".

 

MEMORIAS DE VICENTA BLANCO

Por: Abg. Ana María Rodrigues Macedo

Crònista Comunal

18/12/2017

 

Batalla de Los Colorados

La Batalla de  Los Colorados, fue una acción militar en Venezuela durante la revolución legalista que tuvo lugar entre el 03 y el 05 de octubre de 1892. Junto a la Batalla de Boquerón, marco el final de la campaña militar después del avance de Joaquín crespo hacia Caracas al frente de más de 10.000 hombres y que los generales José Ignacio Pulido y Luciano Mendoza los esperan en Los Teques. Mendoza, Pulido y Guillermo Tell Villegas Pulido se retiraron y abandonaron Caracas el 06 de Octubre. La ciudad quedo desprotegida y bandas de saqueadores invaden las residencias de Raimundo Andueza Palacio, Pulido, Sarria y otros dirigentes del gobierno vencido, así como oficinas del Diario La Opinión Nacional. A pocas horas, Crespo entra a la Capital, marcando el triunfo de la revolución legalista.